¿Por qué un jubilar?

Mudarse de casa

Un Jubilar (senior cohousing) no es una residencia, es un equipo de personas que han decidido cambiarse casa para vivir uno al lado del otro. Nadie tutela a nadie, cada uno sigue viviendo en su casa, y puede quedarse en ella cuanto le plazca. Sencillamente se encuentran en un conjunto de viviendas diseñadas por ellas mismas para favorecer unas intensas relaciones de vecindad, con unas instalaciones comunes próximas y accesibles que invitan a la reunión y la participación.



Autonomía personal a través de la comunidad

No es una paradoja: la participación en una vida comunitaria, realizada desde un escrupuloso respeto a la intimidad y privacidad de cada individuo, aporta un inmediato enriquecimiento en experiencias y un soporte emocional y cotidiano que aumenta la confianza y seguridad en uno mismo. Una comunidad me aporta justo el apoyo que necesito, porque yo mismo regulo mi relación con ella. Así aumenta mi independencia, soy más dueño de mis decisiones, más autónomo.


Inserción en la sociedad

Incluirme en una comunidad de mayores no significa encerrarme en ella, sino encontrar un medio de participación social. Ya que al unirme a otros soy capaz de hacer más cosas y más complejas, mi capacidad de influencia en la sociedad general es mucho mayor. Una comunidad de mayores es una entidad viva y dinámica, ansiosa de interactuar con el entorno social en que se encuentra.